ESPECIAL 90 ANIVERSARIO ABC SEVILLA 12-10-2019

GUSTAVO BACARISAS Pintor Sevilla de cartel LLEGÓ A SEVILLA EN 1913 PARA INSPIRAR SU PINTURA, PERO SU OBRA ACABÓ INSPIRANDO LA IMAGEN INMORTAL DE LA CIUDAD

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ABCdesevilla.es 12 octubre 2019

HEMEROTECA ABC

La conmemoración solemne del VII centenario de la conquista de Sevilla y de la fundación de la Marina de Castilla sumó parada fluvial, cabalgata histórica y fuegos artificiales en presencia de Franco 1948 12 OCTUBRE

POR MANUEL J. ROLDÁN

E L 20 de mayo de 1947, la Comisión Permanente del Ayuntamiento sevillano encargaba a Juan Miguel Sánchez el cartel de la Semana Santa, y a Gustavo Bacarisas el cartel de la Feria de abril. Una adjudicación directa para asegurar una gran obra en el año del centenario de la Feria. Era mayo, pero la ciudad todavía recordaba la inundación de febrero y las misas en un carro a las puertas de la parroquia de La O. El colorista pintor de origen gibraltareño

abocetaba la idea mientras la ciudad arrastraba años de hambre y olvidaba penas, en pleno junio, con la visita de Eva

Duarte de Perón. Evita estaba en Sevilla, una visita con estampas en la Macarena de trajes claros, varas doradas y mantillas fuera de tiempo. Génesis de un cartel para un año histórico, el de 1948. Bacarisas sintetizaba la fiesta en el brindis de una joven vestida de flamenca junto a un jinete con

Gustavo Bacarisas, en «Autorretrato», de 1939, óleo sobre lienzo de

VIDAS DE PAPEL

ABC

propiedad particular

ciudad». Y la belleza se hizo color en el lienzo «Sevilla en Fiestas», presen- tado a la Exposición de Bellas Artes de 1916 y hoy pieza fundamental del Museo de Bellas Artes. Y la belleza se hizo vanguardia en el cartel de las Fiestas de Primavera de 1917, año de la revolución bolchevique y de las manifesta- ciones pidiendo el pan de Alcalá. Lenin presen- taba sus tesis y Sevilla un cartel de fiestas en el que Bacarisas colocó a dos jóvenes bailando bajo un arco de farolillos rojos, un azul de noche americana y recuerdos del Fauvismo. Y una ciudad internacional que en 1929 tendría un nuevo cartel suyo, el de la Exposición, pura modernidad para cerrar unos años veinte de vanguardia, con la Plaza de España envolviendo a las damas que miraban a Iberoamérica. Pintor, decorador, ceramista, diseñador, ateneísta, académico, viajero. Gustavo Bacari- sas fijó también el canon de la pañoleta de las casetas de la Feria de Abril en 1919. Falleció en 1971, cuando la Feria estaba a punto de mudar- se a Los Remedios manteniendo, eso sí, la estética que Bacarisas había marcado indele- blemente. Para la posteridad, y la inmortali- dad, dejó una Sevilla de cartel.

zahones, chaqueta corta y sombrero de ala ancha. Elegancia en primer plano y en los azules modernistas característicos de Bacarisas, protagonistas de un fondo formado por las pañoletas de las casetas, coronadas por la bandera de España, y una Giralda imaginaria que se asomaba a la feria centenaria. Así lo recogía su rótulo: «Sevilla 1847-1948. Centenario de la Feria de Abril». Un cartel para el año en el que se celebró el séptimo centena- rio de la llegada de San Fernando a Sevilla, año de Santo Entierro Grande y de visitas para la historia: la de Franco, en la inauguración del monumento al Sagrado Corazón de Jesús, y la del doctor Alexander Fleming, el inventor de una salvadora penicilina que en Sevilla todavía se vendía de estraperlo. Bacarisas, pintor nacido en Gibraltar en 1873, formado en Roma y con experiencia docente en Buenos Aires, asentaba una iconografía de la ciudad que ya había captado desde su llegada a Sevilla en 1913: «Llegué a Sevilla con la inten- ción de pasar un temporada dedicado a pintar, inspirándome en la belleza de esta famosa 90 AÑOS DE ABC DE SEVILLA

8/1/1971

ABC dio cuenta de su fallecimiento destacando en la

portada que su «extensa labor

significó un evidente magisterio dentro de las artes plásticas sevillanas»