Especial Patrimonio Cultural de Córdoba y Provincia 2022
4 PATRIMONIO CULTURAL _ CÓRDOBA Y PROVINCIA
5 CÓRDOBA Y PROVINCIA _ PATRIMONIO CULTURAL
JUEVES, 1 DE DICIEMBRE DE 2022 ABC abccórdoba.es
ABC JUEVES, 1 DE DICIEMBRE DE 2022 abccórdoba.es
Los otros Patrimonios de la Humanidad con los que cuenta la ciudad de Córdoba
Aunque la capital cordobesa computa por ella misma 4 inscripciones en la lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO, habría que sumarle otras 2 inscripciones más de carácter inmate- rial, una a nivel nacional y otra a nivel transnacional. Hablamos del Flamenco y la Dieta mediterránea. En el caso de la primera, el Flamenco, la UNESCO la incluyó en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad el 16 de noviembre de 2010. Esta manifestación cultural, única y múlti- ple, símbolo de identidad andaluza y que la representa artísticamente en todo el mundo, cuenta desde entonces con el respaldo de lamayor institución cultural mundial que vela por el man- tenimiento de la cultura y los valores tradicionales. El Flamenco, sobre todo en aquellas localidades que comprende Andalucía, está presente en sus fiestas públicas y privadas. Es herencia de los mayores a través de las más antiguas herramienta de transmisión de la cul- tura: la oralidad. Es industria cultural, motor económico, objeto de estudio y reclamo turístico. Es presente, pasado y futuro, tradición y vanguardia y una de las manifestaciones culturales más ricas y complejas del mundo. Por todo ello, la UNESCO le otorgaba su máxi- mo reconocimiento para la cultura inmaterial. En cuanto a la Dieta Mediterránea, al igual que el Flamenco, fue incluida por la UNESCO en la Lista Representativa del Patrimonio
Cultural Inmaterial de la Humanidad el 16 de noviembre de 2010. Esta can- didatura transnacional, fue elaborada y presentada conjuntamente por España, Grecia, Italia y Marruecos, y coordinada técnicamente por la Fundación Dieta Mediterránea con el objetivo de preservar un legado cultu- ral y gastronómico que define e identi- fica a los territorios mediterráneos desde hace siglos, donde la gastrono- mía cordobesa tiene un papel relevan- te. Tal es así que más allá de los benefi- cios saludables contrastados científi- camente, la Dieta Mediterránea cons- tituye un estilo de vida que equilibra al individuo con su entorno, tanto en lo que respeta a la naturaleza como a su mundo social y cultural. Y es preci- samente en esta esfera que la dieta mediterránea se convierte en legado. Y como legado hay que transmitirlo. Nada se puede transmitir, si no se vive, si no se toma como propio. Por último, aunque no pertenece propiamente a la capital, en la provin- cia cordobesa también encontramos otro ejemplo de una manifestación cultural que se incluye dentro de la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. Se trata de las tamboradas o tamborra- das de Baena, incluidas en esta lista desde noviembre de 2018. Para la UNESCO, esta actividad genera «un ambiente sonoro, fascinante y carga- do de emoción, que suscita en las comunidades sentimientos de identi- dad y comunión colectivas».
mundo. En su historia se resume la evolución completa del estilo omeya en España, además de los estilos góti- co, renacentista y barroco que poste- riormente se insertarían en ella durante la época cristiana. En el año 1984, la UNESCO reconoció a este conjunto como Patrimonio de la Humanidad, convirtiéndose así en la primera distinción de este tipo que la ciudad recibiría. Si la Mezquita-Catedral fue la pri- mera, la ciudad palatina de Medina Azahara fue la última inscripción de Córdoba en la lista del Patrimonio Mundial de la Unesco en 2018. A los pies de Sierra Morena, Medina Azahara fue mandada construir en el año 929 por Abderramán III en una demostración del poder y la ostenta- ción del recién creado Califato inde- pendiente de Córdoba. La ciudad se disponía la ciudad en tres terrazas rodeadas por una muralla, situando el Alcázar real en la más superior y la intermedia. La zona más baja se reservó para viviendas y la mezquita, edificada extramuros. El recinto sufrió grandes destrozos a través de las sucesivas guerras que asolaron al- Andalus a principios del siglo XI, dejando a Medina Azahara en ruinas. Ruinas que volverían a la luz en las excavaciones que comenzaron a fina- les del siglo XIX. Córdoba es conocida además como la ciudad de las tres culturas, pues durante la época de dominio islámico convivieron -con etapas de mayor o menor tensión- musulmanes, judíos y cristianos. Tras la conquista cristiana de Córdoba por Fernando III, en 1236, la comunidad judía de la ciudad man- tuvo parte de su influencia anterior. Tal es así que el rey santo promulgó un fuero donde daba el mismo trato a cristianos, musulmanes y judíos. La
huella judía queda latente en lugares como el propio barrio de la judería, que desde el punto de vista urbanístico presenta el
En lo referente a la influencia cris- tiana, tras la reconquista, el rey Fernando III llevó a cabo la construcción de 14 iglesias,
Trastámara, así como otros episodios oscuros como la epidemia de Peste negra que asoló la ciudad en dos oca- siones. Un siglo más tarde, con la concen- tración de tropas de los Reyes Católicos en Córdoba para dar el golpe definitivo al reino de Granada, se verá un rayo de esperanza en la recupera- ción de la localidad. Aquí es recibido Cristóbal Colón para exponer su pro- yecto de viaje a las Indias que acaba- ría con el descubrimiento de un nuevo continente, América. Una vez tomado el último reducto musulmán, Isabel y Fernando dictan la expulsión de los habitantes judíos de todo el territorio cristiano, lo que supondrá el golpe definitivo para la mermada eco- nomía cordobesa. Por último, no podemos olvidar otra
de las señas de identidad de Córdoba como son los patios. Tal es así que el Festival de Los Patios Cordobeses, que cada año se celebra en la primera quincena de mayo, fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en el año 2012. La Fiesta de los Patios de Córdoba promueve la función del patio como lugar de encuentro intercultural y fomenta un modo de vida colectivo sostenible, basado en el establecimiento de vín- culos sociales sólidos y de redes de solidaridad e intercambios entre veci- nos, estimulando al mismo tiempo la adquisición de conocimientos y el res- peto por la naturaleza en unos encla- ves donde la tradición y el amor por las plantas, que son cuidadas por sus cuidadores durante todo el año, son los principales protagonistas.
típico trazado islámico. Los límites de la jude- ría actual van desde la Puerta de Almodóvar hasta la Mezquita-
templos que reciben el sobrenombre de igle- sias fernandinas en honor al rey. De estas iglesias pode-
TRAS LA CONQUISTA DE LA CIUDAD EN EL AÑO 711, LA DOMINACIÓN ISLÁMICA SE PROLONGARÍA DURANTE 525 AÑOS, ALCANZADO SU SIGLO DE ORO DURANTE LA ÉPOCA DEL CALIFATO
mos destacar algu- nas como las de San Lorenzo o Santa Marina. El siglo XIV traerá consigo años duros para la población cor- dobesa, ya que entre 1366 y 1369 tiene lugar la guerra civil que enfrenta a los
Catedral y la actual sede epis- copal, al sur. Esta zona de la ciudad, junto con el resto del casco histórico que rodea a la Mezquita-Catedral, fue- ron nombrados por la UNES- CO como Patrimonio de la Humanidad en el año 1994.
partidarios de Pedro I el Cruel y a los de su hermano bastardo Enrique de
FOTOS: ARCHIVO / MSOLDÁN
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