Especial Premios La Voz 09-11-2018-SUPLEMENTO
LA VOZ S U P L E M E N T O E S P E C I A L V I E R N E S 0 9 . 1 1 . 2 0 1 8
ESPECIAL XIII PREMIOS LA VOZ 14
Pasión y pureza de la mezcla La cantanteadmitequeCádizha influidodeuna uotramanera en lamitaddesu carrera
Colaboraciones, cómplices, canciones, compositores y discos completos... Casi todos los caminos en su carrera conducen a Cádiz CÁDIZ. La pasión no sabe de fronteras ni países, de lindes ni provincias. Lamú- sica es una de ellas, fuerte, universal y antigua. Hasta de las épocas se ríe por- que toda la música capaz de emocionar permanece, sobrevive y vuelve, si con- serva fuerza nunca es vieja ni nueva. Ana María Alías Vega nació en Madrid y desde los tres años creció en el barrio de NuevaMálaga de la capital malague- ña de donde es originaria su familia. Pero como enamorada de la música, se dejó llevar por la pasión. Hasta el punto de ponérsela por nombre artístico con su segundo apellido como compañía. Ese arrebato le trajo a Cádiz casi por casualidad, como suceden las mejores cosas. «Creo que tendría 17 ó 18 años y llegué a Cádiz porque Antonio Martí- nez Ares me había hecho una canción que íbamos a grabar, ‘La nana para un rey’. Era la primera canción que hacían para mí y recuerdo, nada más entrar, desde que iba en coche pensaba en lo queme gustaría vivir en esta ciudad, en que podría vivir enCádiz. Me quedé ob- nubilada. Pensé en regresar desde el pri- mer momento. Luego siempre había una razón para volver, venía constan- temente, hasta que me quedé». Luego vinieron flechazos de todo tipo que agrandaron la herida, tanto perso- nales como artísticos: «Empecé a salir con un chico de Cádiz, que vivía en la ciudad y también desde el principio em- pecé a trabajar conMartínez Ares o con Jesús Bienvenido, con Chipi, El Pájaro, con Javier Ruibal…Me fui haciendo un grupo de amigos en lamúsica y también fuera. Por último, tuve a mi hija enCá- diz. Que ya no hay mayor vínculo que ese para una madre». El resultado es una conexión senti- mental con la ciudad y la provincia. Aun- que le dan apuro los celos de sus paisa- nos y cada vez que dice lo mucho que significa Cádiz para ella añade alguna coletilla parecida a «tanto como Mála- ga», o «igual que Málaga». Entre risas, admite que dentro de poco habrá pa- sadomás tiempo de su vida viviendo en la capital gaditana que en la malagueña pero lamúsica es Pasión y habíamos que- dado en que no sabe de localismos ni acentos ni límites geográficos. LAVOZ la distingue en 2018 con uno de sus premios anuales en su XIII edi- ción porque pocas personas han cogido tantas veces y con tanta elegancia la ban- dera sonora de esta tierra: «Es verdad que si echo la vista atrás, entre autores,
lo gaditano está siempre presente en su vida, en sumúsica y en su carrera. Afir- ma que nunca ha lamentado trabajar en un lugar periférico comoCádiz, lejos de los centros de decisión, contratación y creación como Barcelona oMadrid: «Es cierto que a veces puede complicar un poco por las distancias, porque las in- crementa, puede tener una repercusión en el trabajo físico, en los desplazamien- tos, pero cuando es un trabajo creativo influye menos. En estos tiempos, con la tecnología actual no echo de menos nada de una ciudadmás grande. En una ciudadmayor hay contactos y situacio- nes que no se dan tanto, no se llega a la calidad de vida de un lugar como Cádiz. El tiempo de ocio es más satisfactorio por lo que aporta poder pasear tranqui- lamente, estar con la familia, poder con- versar... El contacto humano con esos amigos quemencionaba te lo da una ciu- dad pequeña es un regalo que luego tam- bién tiene consecuencias artísticas». Re- sume su aprecio por Cádiz «en el mar. Necesito el mar. Engancha». Una de las mágicas virtudes deCádiz, de Andalucía y de la música es el mes- tizaje, esencial para la tarea creativa de una artista como PasiónVega: «Esamez- cla es la mejor pureza. Cádiz, desde lo geográfico, tiene la mezcla. Yo tengo raízmalagueña y amo la copla pero tam- bién están los sones flamencos, lo ára- be, los sonidos de América, tanmaravi- llosos y tan distintos, con tanta rique- za... Son combinaciones maravillosas de las que siempre aprendes y te alimen- tas como artista». Con todo, pese a ser una enamorada de Cádiz, Pasión es conocedora de sus dificultades: «Sucede siempre con el Sur, en todos los países del mundo. No sé si es por algo geográfico, cultural… El Sur siempre es el más castigado. En Cádiz, enAndalucía, haymuchas personas en una situación de precariedad complica- da pero los demás nos conocen por nues- tra alegría, por nuestra creatividad y nuestra luz. Creo que, muchas veces, fuera tienen una imagen más positiva de nuestra tierra que nosotros mismos. Tenemos una imagen luminosa, quizás por nuestra cultura, por fenómenos como el Carnaval. Aún así, es importan- te que demos ese paso para mejorar la situación de muchas personas , para lo- grar que haya menos personas en paro, sin perder nuestra alegría y nuestra vi- talidad, sin perder esa luz. Nos falta dar ese paso, enCádiz y en todaAndalucía». Aunque vecina habitual de la capital de la provincia, confiesa que tiene pa- raísos a los que escapar en la provincia: «Zahora y Tarifa son dos de mis favori- tos. Son sitios en los que hay un turis- mo relajado, familiar, donde se puede estar y sentir, improvisar, sin que todo esté organizado ni aglomeraciones».
Pasión Vega recibe el galardón de Catalina Luca de Tena. :: A. V.
discos como ‘La Reina del Pay Pay’, las habaneras, dónde fueron compuestas o grabadas…Resulta que el 50% demi ca- rrera y mi repertorio, o más, tiene que mucho que ver con Cádiz». En esa larga y amorosa relación des- taca su pregón del Carnaval en el año 2007 o el mencionado disco ‘La Reina del Pay Pay’, con el que alcanza el Dis- co de Oro por sus ventas. Aunque reu- nía a diversos compositores, destacaba por el número de temas el gaditano Je- sús Bienvenido, que ya participaba en su anterior trabajo ‘Flaca de Amor’. Con esa monarquía del mítico local del barrio de Santa María recorre Espa- ña con 70 conciertos en los que destaca una teatral y original puesta en escena que lanza guiños constantes a la leyen- da bohemia del local gaditano. Y es que
«Creo que, muchas veces, fuera tienen una imagen más positiva de nuestra tierra que nosotros mismos» «El contacto humano, la calidad de vida que da vivir en una ciudad pequeña es un regalo... También en lo artístico»
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