Gurme Córdoba 11-Otoño-Invierno 2021

ENTREVISTA

habrá visto pasar a familias enteras y verá cómo van creciendo. Hombre, yo tengo chavales que les he dado el bautizo, la comunión…y ahora les estoy dando cerveza. Es normal, tengo 53 y llevo cuarenta años aquí. Empezamos con la transmisión de conoci- mientos de su padre a usted, ¿la hay ahora de usted a la siguiente generación si la hay para ocuparse de El Tomate? Mi hija precisamente termina este año psico- logía en la universidad Loyola, así que vamos a tener una psicóloga de verdad (ríe). Y mi hijo Manuel está aquí, va conmigo a todas partes. Tiene 18 años y tiró su primera caña con diez. Está entres sus estudios y El Tomate, echándo- nos una mano. Yo pienso por un lado que ojalá haya una nueva generación en El Tomate, y por otro lado ojalá no, no sé si mis hijos deben buscarse las habichuelas por otro lado. Bueno, esperemos que El Tomate llegue a los cien años. Para mí, para mi casa y para mi pueblo, Bujalance, porque nos hacen muchas visitas por la buena gastronomía, sería un orgullo. Si hay que estar hasta los cien años, aquí estaremos.

¿Quién es?

Con 53 años Alfonso Tello aún se consi- dera joven para la profesión, en la que empezó a hacer sus primeros pinitos con unos trece. Así que el dicho «de casta le viene al galgo» no es un tópico en su caso, sino descripción certera de una labor ejercida durante décadas, tiempo en el que ha visto evolucionar usos y costumbres en torno a la gastro- nomía, lo que solicitan los clientes y el propio servicio. Ha aprendido el oficio de quien era maestro en el oficio, su padre, y ahora se lo transmite también a sus hijos. Desde la cercanía en el trato de la barra a la cordialidad del proceder en la sala, el trabajo del res- ponsable de El Tomate es una muestra de esa sapiencia que surge cuando la experiencia propia se mezcla con el magisterio pasado y las enseñanzas por impartir a los más jóvenes.

RESTAURANTE BAR EL TOMATE Calle Rector Viejo, 2, Bajo, BUJALANCE & 957 17 02 62 i

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