Gurme Sevilla 24-Verano 2022

ENTREVISTA

Detrás de la barra... Ricardo Laguillo

Hay clientes que llegan a la Bodeguita San Loren- zo pensando que es la Antigua Abacería de San Lorenzo y viceversa. Ricardo Laguillo les avisa: “ustedes lo que buscan es la esquina contraria”. Al capitán de esa otra esquina llamó él cuando le ofrecieron quedarse con el establecimiento más antiguo del barrio de San Lorenzo. “Si Ramón me hubiera dicho ‘no me hagas esto’ no lo habría co- gido, pero no somos competencia, somos amigos”, aclara. Así, en 2019 tomó las riendas de la bodega que hoy nos ocupa, aunque ya llevaba años en el sector como socio del Mercado del Barranco y de la marca Ta Plato, entre otros negocios. No obstante, sigue compaginando su faceta de hoste- lero con otras ocupaciones, aunque confiesa que cuando se mete detrás de la barra el reloj deja de marcar las horas.

¿Cómo es la clientela que viene a la Bodeguita? Hay tertulias de diario, muchos somos amigos, vecinos y familiares que tenemos un contacto continuo. ¿De qué les gusta hablar? De lo que toca: las elecciones, la Semana Santa, el Rocío... ¿Hay buena relación entre los hosteleros del barrio? Completamente. Con Ramón ya tenía una gran amistad desde hace años, pero hay compadreo con todos y nos visitamos mutuamente en nues- tros ratos libres. ¿Han sido aliados en los tiempos más difíciles? Intercambiábamos continuamente opiniones, sobre si cuando abrir, si la terraza, si empezar a poner cafés cuando no se podía abrir por las noches... La pandemia ha cambiado el criterio del cliente, que ahora es más reacio a agolparse en una barra y prefiere terraza, por eso espero que no nos quiten las tarimas que tenemos en la calzada.

¿Por qué decidió coger la gestión de la Bodeguita San Lorenzo? Era un negocio histórico. Hice una pequeña re- forma pero mantuve su sello. Y tengo la suerte de que pude ampliar la carta porque aunque aquí no hay cocina al tener justo en frente Ta Plato puedo traerme las cosas de allí, lo que da mucho juego porque el cliente puede disfrutar de una cocina actual en un espacio de 1864. Me gusta variar la carta con frecuencia para que el cliente fiel no se aburra. ¿Es éste un sitio más de sevillanos o de turistas? Es un bar de sevillanos, aunque también paran turistas porque es un sitio con historia, como demuestran los documentos que cuelgan de sus paredes (facturas y escrituras antiguas del establecimiento). Es también un bar de tertulias cofrades, y dan mucha vida los días corrientes que son más tranquilos. ¿Le gusta conocer a todo el que llega? Conozco a la mayoría, de hecho llegan y me bus- can. Si no estoy me llaman al móvil...

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