PASIÓN EN CÓRDOBA 2025

El exhermano mayor, ante el misterio de la Sagrada Cena

VALERIO MERINO

material, pero tú tienes que pensar qué estás haciendo aquí. Qué estás haciendo en tu cofradía, en tu vida cris tiana. Mi vida cristiana es mi Cristo y mi Virgen, se llame como se llame. Mi Cristo, mi oración que me enseñó mi Cristo; la madre de Dios, la que sufrió por Él y sufre por nosotros, la que nos tiende un manto para cobijarnos. Eso para mí es lo importante, la interioridad del sentimiento de uno por el Señor y por su Santa Madre. La cofradía estaba bien en la Trinidad, pero sabía que allí no podría crecer ni salir de su templo. «Las herman dades del Vía Crucis y de la Santa Faz, por su antigüedad, tenían copado el barrio. Nosotros estábamos muy limi tados a la hora del crecimiento en la nómina de herma nos. Había que buscar algún sitio ver si podríamos salir en un futuro no muy lejano de dentro de la iglesia, y don de tuviéramos un campo en que abastecernos de herma nos». Primero fue un piso en la calle Antonio Maura, en una segunda planta. Incómodo para subir y bajar cosas: «Imagínese para girar el bacalao por las escaleras». La Providencia quiso que un hermano que vivía en Ponien te, entonces un barrio muy nuevo, supiese de un local en

venta, en un pasaje, que pertenecía a la promotora Ote rol. Pedro Rojas es un hombre de números, y tras expli cárselo con profusión al empresario, Antonio Rodríguez Carretero lo resumió: «Quieres un local y no tienes dine ro para pagarlo». Efectivamente. «Le hice un planning con lo que se podía aportar, por Feria, por Cruces, por cuo tas. Me presenté al día siguiente, vio el planning y a las dos horas me llamó la secretaría para decirme que bus cáramos un notario. Luego me entere que es cofrade has ta la médula y nos hizo un favor tremendo». Era el año 2000. Luego llegó el otro local, justo enfrente, adquirido de la misma forma a Marín Hillinger, pero para entonces la hermandad ya estaba en una iglesia, la del Beato Álva ro de Córdoba, a veinte metros de su nueva casa. —¿Y no lo buscaron? ¿Fue providencial? —Sabíamos que iban a construir una iglesia por esta zona de Poniente, pero no dónde. Se hicieron gestiones, hasta que conseguimos tener una reunión con don Tomás Pa juelo, párroco de esta iglesia y empezamos una ‘aventu ra’ que ha dado muy buenos frutos. —¿Y era estar en este barrio tal y como lo esperaban? —No, sinceramente, y que me perdonen las personas que

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«Muchos curas desconfiaban de las cofradías. Y sí, a veces podemos dar problemas, pero no cuando tenemos algún pastor que nos guíe»

«Siempre he dicho que hermandades, cuantas más, mejor, pero cofradías, despacito. Hay que reunir requisitos para salir a la calle»

«A los que tenemos unos años y pertenecemos a la Iglesia nos duele entrar al templo y que no haya familias de entre 30 y 40 años»

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PEDRO ROJAS: «LLEGA UN MOMENTO EN QUE SE ANTPONE LA COFRADÍA A LA FAMILIA»

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